Entrevista a Guitián en el Periódico de Aragón

—Vuelve a jugar el domingo contra el Zaragoza, esta vez en Valladolid, y ya lo hizo en La Romareda en la Copa del Rey. ¿Le dolieron los pitos ese día?

—No, la verdad es que no. Entiendo que la gente tenga sus opiniones siempre y cuando se muestren con respeto. Sí que me dolió que se dudase de mi profesionalidad, como si me hubiese vendido en el último partido ante el Llagostera. Son cosas absurdas, que además no se pueden decir como si tal cosa, hay que demostrarlo. Yo defendí la camiseta del Real Zaragoza siempre con todas mis ganas, incluso jugué muchos partidos lesionado y tengo la conciencia tranquila porque lo dejé todo en cada partido y en cada entrenamiento.

—¿Cuánto pesó Palamós en su decisión de no seguir?

—Pesó, claro. Pero tampoco fue tan determinante. Ese partido fue duro para todos, no es de esos que se olvidan fácilmente. Al final, son cosas del fútbol, nadie lo esperaba y el más crítico soy yo conmigo mismo y sé que hice un mal encuentro. El Zaragoza era el mejor posicionado para la renovación, pero se complicó por diferentes motivos, como la salida del entrenador, y tomé la decisión de venir al Valladolid, que apostó muy fuerte por mí.

—Zapater dijo hace poco que le llamó y que usted le argumentó para no renovar en el Zaragoza que ese partido iba a ser recordado siempre.

-—Esas cosas si él quiere contarlas, pues que las cuente. Si ya lo ha dicho, ya se sabe, no hace falta que lo corrobore yo.

—Pero al final es justo escucharle, porque quedó como si usted huyera, como si no quisiese renovar solo por eso. ¿Tan pesada veía esa losa?

—Es que todo el mundo piensa que esa losa es muy elevada. Creo que la afición aún tiene ese pensamiento. Es que leí cosas tremendas, que si éramos una escoria y que nos vendimos. Fue solo un día malo, a todos nos duele, pero se ponen adjetivos a los jugadores que no se merecen. Lo único de lo que se me puede culpar fue de jugar un mal partido, tener un mal día, pero eso le puede pasar a cualquier futbolista.

—¿Cree que ese partido ante el Llagostera aún está en la memoria de la afición zaragocista?

—Usted está más en Zaragoza que yo, pero no sé hasta qué punto se habrá olvidado ese partido. Es que aunque no quieras leer las cosas, te llegan. Y son acusaciones feas, tal y como está además el tema del amaño de partidos. Son cosas que duelen, no quise darle más importancia e insisto en que mi conciencia está muy tranquila. Cualquiera que me conozca un poco sabe que yo nunca me dejaría ganar, que no me vendería. Mire, yo tengo un recuerdo buenísimo de Zaragoza, disfruté mucho esos meses allí, hice grandes amistades y todavía sigo hablando con algunos de los jugadores que están. Espero que les vaya bien a partir del domingo.

—Han pasado 5 meses. ¿Se explica algo ya de aquel 6-2?

—El error fue que casi todo el mundo daba ya por hecho el estar en el playoff y hay que respetar a los equipos. Ellos no se jugaban nada, salieron a disfrutar, casi de vacaciones, y nosotros teníamos una presión añadida. Es que además yo he visto igual unas cien veces ese partido después. Y no nos salió nada. Ellos todo lo que chutaban iba para dentro y nosotros no estuvimos bien.

—¿Cree que la presión aquí es mayor que en cualquier otro club, que esta camiseta pesa más?

—Creo que sí, es que es normal que esa presión sea mayor que en cualquier otro club. Esa camiseta pesa, pero también es muy bonito llevarla. Las camisetas como la del Zaragoza son las mejores para llevar porque es muy difícil llegar a clubs así, históricos. Si tienes esa suerte de llevar ese escudo, o el del Valladolid, pesa, pero estás orgulloso.

—El Zaragoza llega en crisis de resultados a Pucela, con cinco jornadas sin ganar.

—Empezó muy bien, pero todos sabemos lo difícil que es Segunda y nosotros mismos hicimos hace poco cinco derrotas seguidas. En esta categoría te puede ganar cualquiera y muchos partidos se deciden por detalles. El que más paciencia tenga, el que más confíe en su trabajo, en el proyecto, es el que llega lejos.

—La impresión con el Zaragoza es que tiene buen once, pero escaso fondo de armario. ¿Está de acuerdo con esa afirmación?

—He visto casi todos sus partidos. A mí me parece que por nombres tiene un gran equipo, muchos no tienen en Segunda esos futbolistas y es un conjunto peligroso. Tiene gente con experiencia como Zapater o Cani, y jugadores contrastados ya como Lanzarote, Angel, Erik Morán, Javi Ros... Es un gran equipo y se merece paciencia. Entiendo la presión por no ganar, pero aquí en Valladolid, por ejemplo, hemos acumulado derrotas y la prensa y el entorno han transmitido una tranquilidad enorme y gracias a eso se sale también de esas malas dinámicas. Aquí se ha seguido confiando en el entrenador y en el equipo, la gente veía que las cosas se hacían bien y hemos dado la vuelta a la tostada.

—Milla va amenazado de despido a Valladolid. Paco Herrera pasó por esa misma situación en Pucela, ¿no?

—Bueno, no crea. Aquí con Paco (Herrera) sí hay paciencia, se le ha dado un proyecto con tiempo y en ningún momento se le ha visto preocupado por su puesto ni nada de eso, aunque sí por la marcha del equipo. Con un entrenador de esa experiencia se mejora y se avanza y eso nos ha pasado.


—¿Valladolid y Zaragoza son rivales directos por subir?

—Sí, seguro que sí. Lo que ni ellos ni nosotros podemos esperar es estar arriba solo por el nombre, vamos a tener que trabajar muy bien, porque esta Segunda es igualadísima. No hay más que ver el Mirandés y el Lugo, que hasta la última jornada ni habían perdida. Para mí el Zaragoza es un claro candidato para luchar por estar al menos en el playoff. El problema es que hay muchos otros equipos con un nivel similar en la categoría. Ha subido el nivel de la Segunda en esta temporada y el Zaragoza está entre los diez candidatos para estar al final entre los seis primeros, pero eso después hay que demostrarlo.

—Empezó la temporada como suplente tras muchas molestias durante el verano, pero ahora ya está jugando de titular en el Valladolid.

—Sí, he cogido una buena racha por fin y he alcanzado mi nivel. Además, cuando me llegó el momento hemos tenido la suerte de cambiar la dinámica de derrotas que llevábamos. En pretemporada me costó por el tema de la fascitis que arrastraba el año pasado. Ahora, estoy muy contento, me siento muy a gusto aquí en Valladolid.

Link: http://www.elperiodicodearagon.com/noticias/realzaragoza/guitian-lei-eramos-escoria-vendimos-solo-fue-dia-malo_1151846.html

Previous
Next Post »