Gonzalo Melero ha despertado esta temporada. A sus 23 años ha asumido galones en el Huesca haciendo olvidar a Fran Mérida. No era un papel ni mucho menos sencillo, pero pocos se acuerdan ya del catalán. El mediocentro criado en La Fábrica se está convirtiendo en fundamental en el Huesca. Su juego no deja de crecer. Tiene buen criterio para salir con la pelota jugada, un largo recorrido que le permite enlazar entre defensa y ataque, además de una personalidad cada vez mayor sobre el césped. Melero ha evolucionado hasta convertirse en un joven con dotes de veterano. Y además, aporta gol. Su presencia en el área cada vez que el Huesca tiene un lanzamiento de esquina le convierte en una amenaza para el rival. En eso se ha convertido en especialista. Ante el Mallorca, de nuevo, vio puerta a la salida de un córner. Son ya siete goles en total los que acumula el madrileño.
En lo que va de curso ha participado en 28 partidos, tres de ellos en Copa. Y su crecimiento ha cerrado las puertas del once a Sastre y a David López. Sólo el cumplimiento de sanción por ciclo de tarjetas le sacó del verde hace ya ocho jornadas. Cumplió y regresó para ser titular de nuevo en los últimos siete partidos.Melero forma pareja junto a Juan Aguilera. Ambos ejercen de equilibrio y luz en el juego del Huesca, siempre acompañados por Samu Sáiz, encargado de ser la chispa, la diferencia en el ataque del Huesca. Poco se parece el Melero que debutó como titular en la primera ronda de Copa ante el Girona en septiembre al actual. En esa ocasión, venció el Huesca. Pero Anquela tampoco cesó en su empeño por confiar en su figura cuando le otorgó la primera titularidad en Liga. Fue exactamente hace una vuelta, en Mallorca.
En lo que va de curso ha participado en 28 partidos, tres de ellos en Copa. Y su crecimiento ha cerrado las puertas del once a Sastre y a David López. Sólo el cumplimiento de sanción por ciclo de tarjetas le sacó del verde hace ya ocho jornadas. Cumplió y regresó para ser titular de nuevo en los últimos siete partidos.Melero forma pareja junto a Juan Aguilera. Ambos ejercen de equilibrio y luz en el juego del Huesca, siempre acompañados por Samu Sáiz, encargado de ser la chispa, la diferencia en el ataque del Huesca. Poco se parece el Melero que debutó como titular en la primera ronda de Copa ante el Girona en septiembre al actual. En esa ocasión, venció el Huesca. Pero Anquela tampoco cesó en su empeño por confiar en su figura cuando le otorgó la primera titularidad en Liga. Fue exactamente hace una vuelta, en Mallorca.
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